Esta semana fui convocada para celebrar “San Valentín” de
una manera muy original, con un tour por el Madrid Romántico.
Esta actividad organizada por Arte Consentido, a través de
facebook, lleva desarrollando este tipo de actividades desde hace tiempo.
Elena, su precursora, nos redescubre Madrid a través de la historia, la
literatura y el arte.
Palacio de Longoria,sede SGAE |
El tour comenzó en Alonso Martínez a primera hora del
domingo. Nos adentramos en el mundo romántico con unos versos de Don Juan
Tenorio y ya situados en ese momento histórico comenzamos nuestra andadura por
las calles cercanas a la Plaza de Santa Bárbara.
No es habitual visitar museos en este tipo de recorridos
pero al ser una ocasión tan “especial” y romántica, hicimos una parada
obligatoria en el desconocido Museo del Romanticismo. Para mi sorpresa, estaba
repleto de gente y tuvimos que esperar para entrar, eso sí, fue una espera muy
agradable en un magnífico vestíbulo que nos anticipaba algo de lo que veríamos
en el resto de las salas.
Es una casa de 1776 decorada con obras de arte de muy buena
calidad, tanto pinturas como mobiliario e instrumentos musicales donados al
Estado en 1921 por Benigno de la Vega-Inclán y Flaquer, II Marqués de la
Vega-Inclán (1858-1942) y por otros personajes de la época. Se abre al público
como tal en 1924.
Patio Museo del Romanticismo |
Cabe destacar el magnífico patio que actualmente forma parte
de la cafetería del museo y donde se desarrolló otra de las sorpresas que nos
tenía preparada Elena: “You&Me”, nos emparejamos por azar y convertidos en
personajes de la época nos pusimos a escribir cartas de amor emulando a los
románticos de antaño, ¡pero sin suicidios de por medio! Nos sorprendimos
gratamente y comprobamos que el romanticismo no está muerto del todo, fue uno
de los momentos más divertidos del día.
Al salir de allí anduvimos hacía la zona de Tribunal para
detenernos ante otros edificios significativos de la época como el actual
Tribunal de Cuentas, la Real Academia de Farmacia o la Iglesia de San Antón.
Fue una manera muy agradable de redescubrir Madrid y conocer
a otras personas en el camino. Desde luego ¡hay que repetir! Creo que he oído
algo de un paseo por el Madrid de los Austrias...